viernes, 30 de septiembre de 2011

LA UNIVERSIDAD NO ES UNA FÁBRICA DE PARADOS


LA UNIVERSIDAD NO ES UNA FÁBRICA DE PARADOS
(J. Prats. Publicado en Escuela. 29 de Sepbre. de 2011)

Se dice en tertulias y en artículos que existe un paro generalizado entre los diplomados y licenciados, que la oferta universitaria está sobredimensionada, que sobran estudiantes universitarios, etc. Los que así opinan nunca citan las fuentes en las que basan estas afirmaciones. Los informes REFLEX (2006), CHEERS (1999),  CYD (2010) y otros que han dado datos sobre el tema no sustentan estas aserciones. La Encuesta de Población Activa (EPA), que ofrece porcentajes de parados por franjas de edades, no permite un análisis específico y suficientemente focalizado para poder afirmar lo que dicen los insensatos “opinadores” a los que me he referido.

Si hay en España una base de datos fiable que permite conocer el grado de inserción laboral de los universitarios es la que, desde el año 2001, publica la Agencia de Calidad del Sistema Universitario de Cataluña (AQU). Se trata de las conclusiones de una encuesta que se realiza trienalmente entre los graduados de las universidades catalanas a los tres años de obtener el título de licenciado o diplomado. Son ya cuatro oleadas con un número de encuestados siempre superior al cincuenta por cien de los que concluyeron sus estudios. La última encuesta, presentada hace unas semanas, se refiere a los veinte ocho mil estudiantes que habían acabado la carrera en el 2007; de todos estos, durante el mes de enero y marzo de 2011, se entrevistaron a más de dieciséis mil. Este amplio trabajo de campo permite disponer de información detallada, titulación por titulación, con un nivel de confianza muy elevado.

Los resultados se refieren únicamente a los titulados de las universidades catalanas, pero, con las debidas correcciones, es posible extrapolar las conclusiones al conjunto de los graduados del sistema universitario español. Es lo que indican algunas observaciones realizadas con estudios de este tipo en diferentes universidades del resto del Estado.

¿Qué resultados se han obtenido en el estudio presentado por AQU? ¿Trabajan los titulados en profesiones de su nivel de estudios al cabo de los tres años de haber finalizado la carrera? ¿Cuánto ganan? ¿Qué diferencias hay entre hombres y mujeres? ¿Cómo encontraron el primer trabajo?...No es posible en un artículo responder a estas y muchas otras cuestiones que ofrece el estudio, por lo que me referiré, tan solo, a algunas conclusiones referidas al nivel de ocupación. Son éstas:

El ochenta y nueve por cien de las personas graduadas está empleada o tiene un trabajo estable por cuenta propia. Algunos, tres de cada cien, siguen estudiando o no buscan trabajo. Se declaran en paro obligado un ocho por ciento, porcentaje que, siendo alto, es muy inferior a la tasa general y más bajo que el de las personas sin estudios universitarios de edades equivalentes.

El paro afecta de manera desigual según los ámbitos de conocimiento. Los titulados en ciencias de la salud tienen casi pleno empleo. Las ingenierías y las ciencias sociales un buen nivel de inserción, mientras que los que han cursado algunas de las carreras de humanidades (Bellas Artes, Geografía, Historia y Filosofía) tienen una tasa de paro más elevada. Respecto al estudio anterior la desocupación ha crecido en cinco puntos, mucho si consideramos que la tasa de paro era, en las encuestas anteriores, ligeramente superior al cuatro por cien. 

La mitad de los ocupados tienen un contrato fijo y más del ochenta por ciento realizan trabajos con funciones propias de una titulación superior, aunque no siempre ligada a la carrera universitaria que aportaron para conseguir el empleo. Los que tienen una adecuación menor entre estudios y actividad laboral son los de carreras de humanidades, siendo estas titulaciones las que menos garantizan que el trabajo realizado tenga un nivel que exija estudios universitarios (un 30%). La mayor adecuación de estudios y profesión son los de las carreras de  medicina y enfermería. De los que trabajan, la mitad tienen ingresos superiores a dos mil euros mensuales, el resto son dosmileuristas y  diez de cada cien son mileuristas.

Son muchas las interesantes conclusiones que se desprenden del estudio de AQU Catalunya: inserción y género, satisfacción en el trabajo, tiempo en encontrar empleo, resultados por titulaciones etc. Estas informaciones pueden encontrarse en la web de esta institución.

El estudio desmiente el derrotismo de los que fustigan a diario nuestras universidades y a los que afirman que tenemos demasiados estudiantes en nuestras facultades. Deja sin razón a los que indican que se debería adelgazar a las universidades en beneficio de la formación profesional de grado superior. Cuando lo cierto es que el aumento necesario y deseable de este nivel de la educación superior (FP) debe hacerse sobre la base de  conseguir que gran parte de los estudiantes que abandonan los estudios después de la ESO o durante el bachillerato, puedan seguir formándose.

Debe reconocerse que hay un margen de mejora en los estudios universitarios y que hay que acercar a las exigencias específicas y transversales del mercado de trabajo, la formación que se recibe en la mayoría de las carreras universitarias. Ello sin olvidar la necesaria formación cultural y cívica de los estudiantes. Pero lo que queda claro es que la Universidad no es una fábrica de parados sino de ocupados. Y no es esa la información que se transmite en los medios.

Joaquín Prats

viernes, 9 de septiembre de 2011

Geografía, Historia y otras C. Sociales. Investigación, innovación y buenas prácticas VOL. III

Ya ha aparecido el tercer volumen de la trilogía dedicada a la enseñanza de la Historia y la Geografía. Los autores somos profesores de la Universidad de Barcelona, de Zaragoza, de Santiago de Compostela y de Murcia. Un buen elenco de profesores de didáctica.




Aquí tenéis la cubierta de este tercer volumen y un enlace para ver el sumario:
http://www.grao.com/llibres/geografia-historia-y-otras-c-sociales-investigacion-innovacion-y-buenas-practicas